Y es tu momento, de sacar aquello que ocultaste durante años, de abrir las ventanas, de coger aire, de gritar con todas tus fuerzas aquello que callaste durante tanto tiempo.
Es hora de conocerte y de sacar todo aquello bonito que albergas en tu interior, de ser tú.
De mostrar al mundo todo aquello que eres capaz de hacer, aquello que te daba vergüenza o miedo mostrar.
Eras y eres algo grande, pero no confiabas en ti.
Deja de sentirte culpable, de sentirte débil o pequeño, deja de avergonzarte de tu forma de sentir.
Este es tu momento, este es el momento de lucir bello, sonriente o feliz.
Esa forma de ser que ilumina el mundo. Esa es la verdadera vibración del universo.
La correcta y genuina, el problema es que a veces nos distraemos y nos salimos del camino sin la suficiente luz como para volver a retomarlo.
La condición original del ser humano es esa, el alta vibración de la energía, pero terminamos acostumbrándonos a vivir en frecuencias bajas, en las profundidades, o incluso en las cloacas del mundo.
Es hora de salir, de resurgir, de dejar de acostumbrarnos a vivir en la penumbra. Es hora de salir a reclamar nuestro lugar, nuestra potencia, nuestra valía y lugar. ¿No crees?.
¡¡¡SAL AHÍ FUERA Y BRILLA!!!
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