No es sólo un nombre de una preciosa película. Es un conjunto de ideas y obviedades que a veces pasamos por alto, sin darnos cuenta que realmente son los principios que deberíamos llevar anotados en la cartera a modo de chuleta para que no se nos olvidaran.
Para mí, lo que de verdad importa tendría que ser:
-Disponer de salud, tanto los nuestros como nosotros.
-Sentirse privilegiado al disponer de agua, comida y techo para dormir.
-Disfrutar de energía, ganas e ilusión de cumplir sueños.
-Sentirse ligero de equipaje, ya que es lo que nos hace movernos y facilitarnos la tarea de salir de la zona de confort.
-Disponer de la capacidad de disfrutar de las pequeñas cosas. Saborear algo rico, olfatear el aire con olor a detergente, sentir el tacto de una caricia, absorber la alegría de una sincera sonrisa, alimentarnos de la inmensidad del verde de la montaña y el azul del mar.
-Tener la habilidad de observar lo bello, en nosotros, en los demás e incluso de los acontecimientos adversos (o la tan nombrada resiliencia). Saber sacar el lado bueno de todo.
-Y para finalizar disponer de facilidad para amar, de vencer el miedo a abrirnos al mundo, eso que tanto temor nos produce y que ocasiona inmovilidad y que nos perdamos las mejores cosas que la vida nos ofrece.
Qué importante es amarse a uno mismo de forma plena, saber erradicar el sentimiento de culpabilidad y poner amor a todo lo que hacemos sin temor a las consecuencias.
Qué bonito caminar por el mundo como niños. Con corazón, inocencia, confianza y ausencia de miedo como un Super Héroe, tendríamos en la mano TODO LO QUE VERDADERAMENTE IMPORTA.
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